Todo lo que pasa en una boda y no lo sabes hasta que te casas Y ES NORMAL

Al día siguiente no recuerdas todo al detalle: Es algo bastante común ya que el día de la boda se vive con mucha intensidad, es muy abrumador y pasa muy rápido, lo que hace que los días posteriores nos cueste recordar muchos momentos vividos. Mi consejo es contratar un buen fotógrafo, ya que conseguirá que podamos volver a muchos instantes que no recordábamos con claridad.

Discutir con nuestra pareja en el proceso de la organización de la boda: Como con muchas cosas, no siempre vais a estar de acuerdo en detalles de la organización de la boda. Si a eso le añades el estrés del día a día y, además, el que nos puede generar los preparativos de una boda, es una bomba que en cualquier momento puede estallar. La base de todo es la comunicación y estar abiertos a entenderos en todo momento. Este va a ser el inicio de un camino en el que iréis juntos de la mano, para lo bueno y para lo malo, aprender a escuchar, a entender y, sobre todo, a hablar las cosas desde el respeto, mientras no falte este último aspecto, vamos en buena dirección.

"El día de la boda ni comes ni bebes nada": Bueno.. a ver.. si y no. Por norma general si es así, muchas veces tendemos a pensar que es por falta de tiempo, que también, estamos muy pendientes de los invitados, de las fotos, de momentos importantes, etc. Pero también muchas veces es por nervios. Tenemos el estómago cerrado y nuestra prioridad ese día no es ni beber ni comer, y eso es un error. Lo importante es que físicamente os encontréis con energía para afrontar ese día tan lleno de emociones, y comer y beber algo siempre es una buena opción, lo cual hará también que los nervios vayan disminuyendo poco a poco.

"¿Qué tal? ¿Estás nerviosa?: Es una frase muy típica en amigos y familiares días previos a la boda. Pues claro que estás nerviosa, claro que te abruma la idea de juntar a todos tus familiares y amigos un mismo día en un mismo lugar para celebrar vuestro amor, claro que te intimida la idea, ¡claro que si! ¡estoy nerviosa! y esa pregunta no suele ayudar mucho, al revés, hará que no quieras saber nada de nadie días previos al a boda. Tranquilidad. Siempre habrá alguien que lo pregunte, y siempre tenemos que tenerlo en cuenta. Tampoco la gente lo pregunta con intención de incomodarte, por lo que tenemos que tomárnoslo incluso con humor, no dejar que eso haga que nos genere estrés días antes de uno de los días más importantes de nuestra vida.

Personas que fallarán en el último momento: Esto es algo que pasará, y también es inevitable. Tendemos a agobiarnos un poco más cuando, quedando días para la boda, todavía hay gente que no ha confirmado su asistencia, o personas que la han confirmado, pero finalmente te dicen que no asistirán. Mi consejo es: cuando contratemos la finca, decir un número de personas algo inferior al que esperamos, ya que para añadir cubiertos la finca nunca pondrá problemas, por el contrario, para reducir el número de comensales, es probable que el lugar de la celebración siempre ponga alguna traba. Si tenemos este aspecto en cuenta nos ahorraremos mucho estrés y preocupación, ya que pensaremos que "no pasa nada, no contaba con ello" o "no pasa nada, añado un par de cubiertos más". Y tendremos una solución fácil y rápida, lo cual hará que no nos suponga un quebradero de cabeza.

Personas que te sorprenderán: Y por desgracia, no siempre gratamente. Un aspecto importante de las bodas es que siempre acabamos llevándonos algo positivo de ellas en este aspecto, aunque en un primer momento pensemos que es algo negativo. Cuando vemos que una persona importante en nuestra vida no se implica de la manera que pensamos que lo haría, nuestra sensación es de decepción, y también es normal. Luego, también habrá personas que no pensábamos que se fuesen a implicar tanto en nuestro día, y lo harán, y también será una sorpresa. Quédate con lo bueno de la experiencia, y ten en cuenta que estas cosas van a pasar, siempre habrá alguien que te decepcione, y por el contrario, siempre habrá alguien que te sorprenda gratamente. Sé que es complicado no sentir esa decepción y tristeza cuando alguien importante para nosotros nos falla, pero también nosotros decidimos de qué manera afrontamos esas situaciones. Pase lo que pase, el día de tu boda vas a ser tremendamente feliz, y lo serás estén o no estén, no dejes que eso te suponga un estrés extra que no necesitas.

Siempre pasan cosas: Por muy organizado que lo tengamos todo, por muy en cuenta que tengamos los detalles, por mucho que hayamos repasado la boda de principio a fin millones de veces: siempre pasan cosas. Es algo que nos generará también mucho estrés y preocupación, pero: no pasa nada, pase lo que pase, todo saldrá bien.